Una etiqueta IML o In Mould Label está realizada con una técnica que imprime directamente la información, logo o decoración en el mismo envase. Es decir, se consigue fusionar la etiqueta con la pieza mediante el proceso de inyección.
La etiqueta se coloca en un molde que tendrá la forma final del producto. Cuando el plástico es inyectado, se fusiona, formando una única pieza.
Este tipo de etiquetas están cobrando verdadera importancia frente a las etiquetas convencionales. Y es que, sus ventajas frente a ellas son numerosas.
¿Quieres conocerlas? Te lo contamos todo en este artículo.
Ventajas de apostar por las etiquetas IML
Cero pérdidas
Con el proceso de etiquetado mediante IML la etiqueta queda totalmente integrada en el envase. No hay pérdidas ni roturas, lo que supone una gran ventaja de cara a la imagen de la impresa.
Con una etiqueta convencional existe el riesgo de que la etiqueta se desprenda en el camino del supermercado o tienda hasta la casa del cliente.
Y no hay nada que resulte más desagradable que no saber qué producto se va a consumir, cuál es el nombre de la marca, cuáles son sus recomendaciones de uso o cuáles son su composición o ingredientes.
Para ello, las etiquetas IML aportan la total seguridad de que el cliente tendrá la información del producto en todo momento.
Mayor ahorro
El proceso de etiquetado en molde es un ahorro, sobre todo en grandes tirajes. Este tipo de etiquetado genera los mínimos desperdicios ya que el proceso exige menos mano de obra, tiempo y, a la larga, dinero.
Cuando la etiqueta se ha realizado y el material se ha inyectado en el molde, se obtiene un producto 100% acabado.
Esto no ocurre con las etiquetas convencionales que requieren, por un lado, la fabricación de las mismas y, por otro, la fabricación del envase donde se van a pegar.
Mejores acabados
Las etiquetas IML ofrecen una resolución perfecta. Una vez la etiqueta se fusiona con el material inyectado obtienes una pieza totalmente integrada. Sin arrugas, picadas o desperfectos que sí pueden aparecer en una etiqueta adhesiva convencional.
Su calidad gráfica es perfecta para dar a tu marca un toque de sofisticación, sostenibilidad y elegancia.
Puedes jugar con una amplia gama de colores sin el temor de que puedan parecer algo descoloridos o el tono no se ajuste a la perfección a los colores de la marca.
Mayor resistencia y durabilidad
Las etiquetas IML no se ven afectadas por el desgaste o el uso del producto.
Gracias a su adhesión con el material, es capaz de resistir altas temperaturas como las que pueden ocurrir en ciertos procesos industriales de lavado.
Mayor salubridad
Imagina esta escena… Es verano, las altas temperaturas hacen que se derrita todo lo que toca un rayo de sol.
En un día soleado de picnic llevas una botella de refresco y al cogerla para servir un vaso ves que toda tu mano esta manchada de tinta. Una tinta que además de tóxica y dañina, no es nada fácil de quitar.
Esto es algo que suele suceder con etiquetas adhesivas convencionales y algo que puedes evitar usando etiquetas IML.
El proceso de impresión al que se es sometido este tipo de etiquetado, encapsula la tinta; por lo que no tendrás problemas de que el producto pueda manchar o, lo que es peor, pueda llegar a causar una intoxicación por consumo accidental.
Flexibilidad en cambio de diseño
Las etiquetas IML permiten realizar cambios en el diseño final si no tienes el resultado que esperabas.
Esto es más difícil de hacer en etiquetas convencionales donde se producen grandes tiradas de una sola vez y no siempre puedes ver como va a hacer el acabado final una vez la etiqueta quede adherida al envase.
Productos reciclables
En Creaprint estamos decididos a luchar contra el cambio climático y todas las consecuencias que tiene, no solo para nosotros, sino para el futuro de la humanidad y del mundo.
Gracias a las etiquetas IML podrás contribuir a ayudar el ecosistema y proteger la calidad de vida en el planeta.
Nuestras etiquetas además de fabricarse con la mínima cantidad de residuos posibles, son reciclables. Algo que, además, resulta ser muy atrayente para el consumidor que cada vez está más concienciado con el medio ambiente.
Menor tiempo de producción
Otra de las ventajas más atractivas de este tipo de etiquetas es que su producción es menor que las etiquetas convencionales.
Podrás conseguir un gran número de piezas totalmente completas y decoradas agilizando con ello el tiempo de producción. Tiempo que podrás dedicar a seguir mejorando tu producto.
Como has podido comprobar las ventajas de las etiquetas IML frente a las etiquetas adhesivas convencionales son claras y rotundas. Y es por eso que cada vez son más las empresas que deciden apostar por este tipo de etiquetado en sus productos de mejor calidad.
¿Tú también quieres formar parte de este cambio? Ponte en contacto con nosotros y consigue etiquetas IML de gran calidad y personalizables.